OCTUBRE, MES DEL ROSARIO

domingo, 4 de octubre de 2009

BREVE HISTORIA DEL SANTO ROSARIO
El Rosario es una meditación de los Misterios de la Vida de Cristo, alternada con la recitación del Padrenuestro, Ave Marías y gloria. Este es, en sustancia, el Rosario de la Virgen María, predicado por Santo Domingo de Guzmán y los Frailes Dominicos.

Santo Domingo de Guzmán, nace en Caleruega (España) hacia el año 1170. De estudiante vende sus libros para ayudar a los pobres. Siempre hablaba con Dios o de Dios. Hombre de oración, estudioso y gran predicador que por mediación de la Virgen María, funda la ORDEN DE PREDICADORES. Murió en Bolonia (Italia) el 6 de agosto de 1221. La Iglesia celebra su día el 8 de agosto.
La Madre de Dios, en una aparición a Santo Domingo, sostenía en su mano un rosario y le enseñó a recitarlo, era el año 1208. La Santísima Virgen le pidió que propagara esta devoción por todo el mundo y la utilizara como arma poderosa en contra de los enemigos de la Fe, prometiéndole que muchos pecadores se convertirían y obtendrían abundantes gracias. Domingo salió de allí lleno de celo, con el rosario en la mano. Efectivamente, lo predicó con gran éxito, asombrosamente numerosos albigenses volvieron a la fe católica.
La historia de este santo la podés encontrar en www.dominicos.org, www.ewtn.com o en www.aciprensa.com
Pero, ¿quién estructuró el rosario en su forma de misterios gozosos, dolorosos y gloriosos? Fue otro dominico, el beato Alano de la Roche, nacido en el año 1428 en la Bretaña francesa y que muy joven se hizo dominico.
Grandes difusores del rosario fueron el beato Bartolo Longo y Juan Pablo II, quién agregó los misterios luminosos.
La fiesta de la Virgen del Rosario, fue instituida por el Papa Pío V, el 7 de Octubre de 1.571.
Es digno de resaltar a los Papas León XIII, San Pío X, Pío XI, Pío XII, Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II, que por medio de exhortaciones y Encíclicas, han recomendado orar con el Santo Rosario.
El Papa Pablo VI, escribió: «Esta corona de oraciones es como un compendio excelente del evangelio, y por lo tanto, forma extraordinaria de la piedad de la Iglesia». (Exhort. Recurrens mensis. Oct. 7-1969).
El Papa Juan Pablo II, se ha caracterizado por su devoción personal a la Virgen y su confianza en el Santo Rosario. Él con cartas, discursos, la oración cada mes del Santo Rosario en Radio Vaticana y la visita a los Santuarios Marianos, han demostrado al mundo su amor incondicional a la Madre del Salvador, y Redentor del mundo.
Juan Pablo II decía: «El Rosario es mi oración preferida. Oración maravillosa en su sencillez y en su profundidad. En esta Oración repetimos muchas veces las palabras que la Virgen María escuchó de boca del Ángel y de su prima Isabel. A estas palabras se asocia toda la Iglesia.”


EL NOMBRE Y LA FORMA DEL ROSARIO
Antiguamente se le llamaba "Salterio de la Virgen María" porque con su rezo reemplazaban las personas sencillas que no sabían leer o que no tenían libros, el rezo del salterio, o sea, los 150 salmos de la Biblia que los religiosos tenían que rezar cada semana.
Para poder llevar mejor la cuenta de las oraciones, hacían nudos en una cuerda o ensartaban en ella pequeñas pepitas. Después el nombre que se le dio fue el de Santo Rosario. La palabra Rosario significa colección de Rosas; la rosa ha sido siempre un regalo muy estimado para ofrecer especialmente a las mujeres, y la Iglesia ha creído que a nuestra madre del cielo le ofrecemos una verdadera “colección de rosas espirituales” muy agradables para ella, al rezarle 50 veces el Ave María, la oración que el Ángel Gabriel, Santa Isabel y la Iglesia Católica Antigua, compusieron en su honor.
El Rosario es una verdadera colección de “rosas de alabanzas” que obsequiamos a la más bondadosa de todas las madres, a la más bendecida de todas las mujeres y a la más gloriosa de todas las reinas.
El Rosario se compone de cincuenta y nueve pepitas o cuentas repartidas así: Cinco grupos de diez cuentas cada uno para ir contando las 10 Avemarías de cada misterio y entre una decena y otra una cuenta para rezar el Padre Nuestro que va al principio de cada Misterio; finalmente 5 cuentas al principio desde el crucifijo hasta donde empiezan las decenas. Estas cuentas son en honor de las cinco llagas de Cristo, o de los cinco misterios que se van a meditar.
Todos los Papas del siglo XX han sido hijos devotísimos del Santo Rosario. Su Santidad Juan Pablo II insiste en el rezo del Santo Rosario en familia, en grupos, en privado. Pidió que se invite a todos a rezar, a no temer el compartir tan hermosa devoción, que es una catequesis de la fe. Nos alertó sobre la crisis mundial advirtiendo que nuestras fuerzas humanas no bastan. La victoria, dijo el Papa, vendrá nuevamente de la mano de Virgen María. Es la victoria de Su Hijo Jesucristo, el Señor, Rey del Universo

La importancia del rosario como medio eficaz de los creyentes ha sido confirmada por la Virgen María. Es la oración de los sencillos y de los grandes, está al alcance de todos, en todo tiempo y lugar. El rosario honra a Dios y a la Santísima Virgen de un modo especial. En Lourdes, la Virgen llevaba un rosario en la mano cuando se le apareció a Santa Bernardita. Y también llevaba un rosario cuando se les apareció a los tres pastorcitos de Fátima. Y fue en Fátima donde ella misma reveló a los niños su título: "Nuestra Señora del Rosario".