Lección 4: Proceso de formación de la Biblia

miércoles, 23 de septiembre de 2009

1. Revelación e inspiración:
La revelación es el proceso mediante el cual Dios da a conocer su designio de salvación al hombre. Aquello que estaba oculto se hace evidente, mediante la Palabra de Dios, contenida en los libros bíblicos. La inspiración es la acción de la gracia de Dios, mediante el Espíritu Santo, sobre las facultades intelectuales de los autores sagrados, para que pusieran por escrito la experiencia del pueblo de Dios. En cierto sentido, se puede decir que la Biblia tiene dos tipos de autores: el autor intelectual, que es Dios, que inspira al hombre; y el autor material, que son los hombres de diversos tiempos, abiertos a la acción de Dios.

2. Inerrancia:
Significa que en la Biblia no hay errores de fe. Como se vio en la lección 1, la Biblia no es un libro científico ni histórico, sino un libro de fe.

3. Fuentes y tradiciones históricas:
Las fuentes son los documentos y tradiciones orales que existían en el pueblo de Israel, con base en los cuales los redactores de los libros sagrados escribieron la experiencia de Dios que tuvo el pueblo, especialmente en el Pentateuco. Estas fuentes se conocen como Yahvista (J), Elohista (E), Sacerdotal (P) y Deuteronómica (D). Cada una aporta una perspectiva propia, según el contexto en que se desarrolló y las intenciones teológicas que persigue. Las tradiciones históricas narran, cada una a su manera, la historia del pueblo de Israel, desde los orígenes de la creación hasta su estancia en la tierra prometida, exilio y posterior regreso. Son ellas: Deuteronomista (Dt à 2R), Cronística (Cro, Esd, Neh) y Episódica (Ruth, Esther, etc.).

4. Materiales:
La Biblia se ha venido escribiendo y trascribiendo en diferentes materiales a lo largo de la historia: desde la piedra (Decálogo), pasando por el cuero, papiro, pergamino y vitela, hasta el papel, en que la conocemos hoy, y los medios modernos: magnético, óptico, electrónico, etc.

0 comentarios: